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Aplicación del sistema SCADA en eficiencia energética
El sistema SCADA permite controlar, supervisar y optimizar procesos industriales a distancia. Unidos al empleo de dispositivos que permitan recoger datos periódicamente y de forma fiable, como sensores, suponen una herramienta de enorme potencial.
Por esta razón, cada vez se están implementando con éxito en más sectores, entre ellos el de la eficiencia energética.
¿Qué es SCADA?
SCADA es un acrónimo en inglés que significa Supervisory Control and Data Acquisition (Supervisión, Control y Adquisición de Datos).
No deja de ser un software que permite controlar los procesos en la industria, monitorizar el correcto funcionamiento de estos procesos, y realizar las pertinentes modificaciones para mejorarlos o solventar problemas en caso de que surjan.
El sistema SCADA permite, en definitiva:
- Supervisar procesos en tiempo real: lo que nos permite, a su vez, actuar con la mayor celeridad ante posibles incidencias.
- Llevar a cabo labores de control de calidad: así nos permite mejorarla al poder prevenir errores. A mejores controles de calidad, más competitividad.
- Llevar a cabo labores de control de producción: la recogida de datos también permite optimizar los recursos, tanto humanos como en materia de maquinaria, flujos de trabajo, etc.
- Almacenar datos (big data), para su posterior análisis: estos datos pueden además presentarse en diversos formatos, con gráficos, etc., según los requisitos del usuario.
- Incrementar la seguridad: esto redunda en beneficio de todos.
- Gestionar el sistema en su conjunto: de forma escalable, flexible e incluso a distancia.
¿Cuándo se emplea el sistema SCADA?
Los sistemas SCADA tiene cada vez un rol más protagonista, dentro de la dinámica del Internet de las Cosas y de la Industria 4.0. A día de hoy, es prácticamente inconcebible hablar de una factoría 4.0 sin un sistema de este tipo.
Si bien inicialmente su uso se reducía a procesos productivos dentro del sector industrial, supervisando y automatizando procesos, hoy en día esto ya no es así.
Los sistemas SCADA se emplean cada vez más en otros sectores como el agroalimentario, el sector farmacéutico… o el energético, mejorando en todos estos sectores los procesos de toma de decisiones.
SCADA y la eficiencia energética
De cara a optimizar nuestros consumos, uno de los puntos más sensibles es la recogida de datos y la monitorización de los mismos. Pero también cuando deseamos contrastar si las medidas correctoras que hemos realizado en materia de eficiencia energética están dando los resultados esperados.
A tal fin, es imprescindible definir una serie de indicadores y objetivos, que nos permitan posteriormente valorar el resultado.
Es aquí donde el sistema SCADA puede ayudar de forma realmente sencilla y efectiva. Ayudándonos a ver en tiempo real todos los consumos.
También nos permite crear alarmas y registrar incidencias en materia de consumo, generar hojas de datos para estudiarlos posteriormente, o programar el software adaptándolo a cada caso o cliente en concreto.
Implementación de SCADA en la medida de eficiencia energética
Para poder emplear este sistema, de forma sintetizada, desde ALTERTECNIA recomendamos seguir algunos pasos:
- Elegir los puntos en los que deseamos medir los consumos, bien sea porque son susceptibles de realizar mejoras, o porque ya las hemos realizado y deseamos monitorizar los resultados.
- Planificar la red, el registro o la pasarela que convierta la señal de RS-485 a TCP/IP (pudiendo acceder a través de internet). Obviamente, es posible añadir conexiones inalámbricas dependiendo de las necesidades de cada caso y del nivel de seguridad.
- Elección e implantación del software de registro y control. En el mercado hay disponibles una amplia variedad de softwares de distintos fabricantes y con diversas funcionalidades.