ACTUALIDAD
Smart Storage o almacenes inteligentes: el movimiento smart llega a la logística
Los almacenes inteligentes o automáticos buscan lograr almacenes en los que se lleven a cabo operaciones más rápidas que en un almacén convencional. El objetivo por tanto es que sean más productivos y, como consecuencia, también más rentables.
Sin embargo, plantean a menudo muchas dudas. Por ejemplo respecto a la integración de los distintos sistemas que intervienen en la logística.
Para que el almacén opere de forma fluida es básico crear un sistema automatizado que nos permite, por ejemplo:
- Controlar en todo momento el stock disponible, automatizando los pedidos.
- Dar información en tiempo real a los trabajadores para facilitar su labor, especialmente para reducir tiempos de búsqueda en almacenes muy grandes. Es fundamental tener localizadas piezas y productos en cada momento.
- Usar robótica para mover mercancías de un punto a otro del almacén.
- Preparar pedidos rápidamente.
- Optimizar el espacio disponible.
Son algunas de las aplicaciones de un almacén inteligente, aunque hay muchas más.
¿Cómo funcionan los almacenes inteligentes o automáticos?
Existen distintos sistemas y tecnologías que automatizan los procesos, así como herramientas de software. Podríamos clasificar estos elementos en dos grandes grupos:
Sistemas de automatización
Gran parte de los costes de explotación de un almacén son derivados de las operaciones para preparar los pedidos.
En ese sentido, localizar y transportar las cargas entre las distintas zonas logísticas del almacén es una labor primordial.
Automatizando movimientos por secciones y aumentando el almacenamiento vertical (algo mucho más sencillo de hacer con este sistema y que genera menos riesgos para los trabajadores y para la propia mercancía), ganamos una disposición más compacta y mucho más eficiente.
Para operar con esta dinámica, existen toda una serie de dispositivos. Desde los transelevadores automáticos que sustituyen a las carretillas elevadoras manuales convencionales, a los conocidos como “pallet shuttle”, que no son sino carros autónomos, eléctricos y equipados con conexión WiFi.
Lógicamente, al igual que en una Smart Factory, la comunicación entre las distintas zonas del almacén y la digitalización son elementos esenciales en un almacén inteligente.
Gestión de almacenes inteligentes mediante software
Toda la tecnología anteriormente citada no tendría sentido sin la presencia de un software logístico. Existen, de hecho, dos tipos diferenciados y cuya unión posibilita incrementos exponenciales de los ratios de productividad de un almacén:
- Software de gestión de almacenes: sobre él recaen aspectos como dónde almacenar la mercancía, o la monitorización de su ubicación en cada momento. Este sistema se comunica a su vez con el software de control para detallar el lugar en el que se encuentran las mercancías y las rutas a seguir.
- Software de control: lleva a cabo las operaciones de movimiento de los robots y de los sistemas autónomos del almacén, permitiendo operaciones muy precisas y con elevadas cotas de seguridad.
Beneficios de un almacén inteligente o Smart Storage
Desde ALTERTECNIA estamos convencidos de los beneficios que este tipo de almacenes pueden aportar a las empresas y sectores los implementen, no solo en el ámbito de la logística, también por ejemplo en el de las cámaras frigoríficas donde son cada vez más comunes.
He aquí algunos de los beneficios derivados de estos sistemas:
- Reducción de tiempos en los distintos procesos. Los sistemas autómatas y el almacenamiento vertical aumentan la eficiencia.
- Mejora notable de la precisión. El software empleado permite conocer en todo momento dónde se encuentran las mercancías, qué movimientos realizar, cuáles son las rutas más cortas…
- Ahorro a largo plazo en mano de obra. Aunque la inversión para disponer de un almacén inteligente es considerable, permite a la larga obtener un gran ahorro.
- Control exhaustivo sobre entradas y salidas de las mercancías.
Se trata, en definitiva, de una serie de beneficios que derivan en un mayor rendimiento y rentabilidad del almacén. No es de extrañar por tanto que los almacenes inteligentes gocen cada vez de más popularidad.
