ARTÍCULO
Tendencias tecnológicas en la industria [2024]
En un mundo cada vez más digital y conectado, la industria debe estar en constante evolución para adaptarse. La tecnología es la clave para mantenerse al día, ya que sus aplicaciones están redefiniendo todos los procesos, ofreciendo nuevas oportunidades pero también planteando importantes desafíos. ¿Cuáles son las tendencias tecnológicas a las que debemos prestar atención?
En este post exploramos algunas de las tendencias que están teniendo más impacto en los sectores industriales, desde las relacionadas con los desarrollos basados en inteligencia artificial, hasta aquellas que apuntan hacia un futuro menos contaminante y más sostenible.
6 tendencias tecnológicas que están transformando la industria
Aunque hay más avances tecnológicos que podrían reseñarse, en este caso hemos seleccionado aquellos con mayor repercusión en los sectores industriales. Son estos:
1. Inteligencia artificial
Sin duda, es el motor principal de la innovación durante el próximo año… y los que vendrán, porque las aplicaciones de la inteligencia artificial en todas las áreas de la industria aún no han hecho más que empezar.
A medida que los algoritmos de IA se vuelven más sofisticados, veremos avances importantes en automatizaciones de procesos en todas las industrias, tratamiento avanzado de datos, predicción de tendencias basadas en datos históricos, toma de decisiones empresariales, personalización de servicios a gran escala…
2. Ciberseguridad
La IA también está jugando un papel crucial en la mejora de la ciberseguridad. Los sistemas de IA y el aprendizaje automático (machine learning) están siendo utilizados para prevenir, detectar y responder a las amenazas de seguridad de manera más rápida y eficaz, ya que pueden identificar patrones y comportamientos anómalos a una velocidad inaccesible a los humanos.
Hay que tener en cuenta que cada vez más empresas trasladan sus operaciones y servicios a la nube, por lo que disponer de sistemas de seguridad para la protección de los datos, tanto los propios como los de sus clientes, es fundamental.
3. Industria 4.0 y 5.0
La Industria 4.0, también conocida como la cuarta revolución industrial, se centra en la digitalización y la automatización de los procesos productivos, empleando tecnologías como la robótica, para realizar tareas repetitivas o peligrosas de manera eficiente y sin riesgos. O también la realidad virtual y la realidad aumentada, para el diseño de prototipos, procesos de mantenimiento, formación de empleados, y otros.
Pero ya se está llegando aún más lejos. Si la industria 4.0 se centra en la automatización, la 5.0 explora las posibilidades de la colaboración entre humanos y robots. De ahí que se empiecen a ver cobots o robot colaborativos, preparados para interactuar físicamente con humanos en un entorno de trabajo compartido.
4. Descarbonización
Se trata de un proceso progresivo de reducción de emisiones de carbono a la atmósfera, algo que implica diversas adaptaciones para la industria, que deberá apostar por combustibles alternativos que reduzcan las emisiones de CO2 para frenar la temperatura global del planeta.
En concreto, la Unión Europea se ha comprometido a ser climáticamente neutra en 2050, esto es, que alcanzará las cero emisiones netas de gases de efecto invernadero.
Dado que las emisiones son consecuencia de la actividad humana, la descarbonización es un proceso que afecta a todos los sectores de la industria, que deben afrontar procesos de transición hacia fuentes de energía renovables para minimizar el impacto en el medio ambiente.
5. Chips y semiconductores
Para que la transformación digital en la que el mundo está inmerso pueda continuar adelante, hace falta algo: chips y semiconductores. En 2020 estalló la llamada “crisis de semiconductores” y se comprobó que la escasez de microchips podía poner en grave riesgo a industrias tan importantes como la electrónica o las telecomunicaciones.
Aunque la situación está más estabilizada, si alguna conclusión se sacó de lo sucedido es que es importante que los países busquen la soberanía tecnológica y reduzcan en lo posible su dependencia del exterior.
De ahí que se apueste por la innovación, ya que el descubrimiento de nuevos semiconductores sería una clave para el desarrollo tecnológico y la estabilidad económica a corto y medio plazo.
6. Agua
La gestión eficiente y sostenible del agua se ha vuelto esencial, ya que la escasez es un problema creciente en muchas partes del mundo. Por eso, los avances tecnológicos relacionados con el aprovechamiento de este recurso han pasado al primer plano de la actualidad industrial.
Destinar recursos a proyectos de I+D que mejoren el tratamiento y purificación del agua se ha vuelto prioritario.
Hablamos de reutilización (especialmente en el caso de aquellas industrias grandes consumidoras, como la agricultura), desalinización, monitorización de acuíferos y, en un sentido amplio, cualquier desarrollo tecnológico que ayude a proteger los recursos hídricos y optimizar su utilización.
En conclusión, la tecnología está redefiniendo la industria a un ritmo acelerado. Para las empresas, es esencial adaptarse y, en la medida que puedan, destinar recursos a innovación, para continuar siendo competitivas.
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